2 de junio. Saber esperar

Es necesario que aprendas a esperar.
Es necesario que madures en tu modo de desear o pretender un cambio. Si actúas como un niño, inconsistente en tus deseos, cambiante, saltando como lo hace una pulga de uno a otro, todo el proceso de manifestación se ve enormemente dificultado y la mayoría de las veces paralizado, ya que algunos de tus deseos anulan otros.

Nosotros, los que trabajamos de este lado, los que movemos la materia sutil, siempre, siempre respondemos. A veces pensáis que un deseo se materializará como por arte de magia y aparecerá allí donde no había nada. A veces creéis que sólo con desear atraerás algo a tu vida.
La realidad que hoy podéis anclar es que todo se os ha dado ya, pero vuestras creencias, vuestro vehículo mental y emocional, vuestra identidad no os permite verlo.
Nuestro trabajo con vosotros está en modificar vuestra trama energética para que podáis percibir. Entendemos que si deseas algo en realidad estas diciendo: quisiera abrirme a esta posibilidad.
En ese trabajo debemos liberar patrones y creencias que se hayan mas o menos arraigados, durante ese proceso os encontráis ante cambios que os permiten afianzar las nuevas estructuras, mientras tanto seguiremos trabajando.
Pero es necesario que sepas esperar.
Es necesario que seas claro en lo que pretendes. Que sea coherente y alineado con todo el complejo del que formas parte. Es necesario que estés dispuesto a asumir en ti los cambios necesarios.

Recuerda que no existe fuera nada que no exista ya dentro. Para "ver" algo has de reconocerlo. Siempre empieza y acaba en ti, en tu pequeño universo. Quizá debas aprender a asumir tus propios deseos. De ese modo tu podrás cocrear con nosotros cada uno de ellos.
De ese modo percibirás el mundo tal y como nosotros lo hacemos. Estas invitado. Camina hacia ello